Ministerio de Transporte de la Nación emitió recientemente un decretopara reglamentar el artículo de la ley de tránsito que establece como obligatorio que los niños menores de 10 años viajen en el asiento trasero del auto con una silla de seguridad.
La medida es de aplicación efectiva en todo el país, salvo en las provincias de Mendoza, Córdoba, Capital Federal y Santa Fe que ya tienen una legislación propia sobre el tema.
“Los menores de diez (10) años deben viajar sujetos al asiento trasero, con el Sistema de Retención Infantil homologado al efecto, en relación a su peso y tamaño”, señala el decreto de la cartera que encabeza Guillermo Dietrich, aunque no establece parámetros de contextura física o peso de los niños.
A falta de cifras oficiales, la asociación Luchemos por la Vida destacó que fallecieron 7.213 personas en accidentes de tránsito durante 2017, es decir, unas 20 muertes por día. Y estima que cerca de un 6% (432) de esa cifra correspondió a niños.
La organización afirma que en caso de un choque, “los cuerpos de los ocupantes del vehículo siguen moviéndose hacia adelante a la velocidad que el auto traía hasta ese momento, impulsados por una fuerza enorme, que equivale a 40 veces el peso de cada persona, desplegada en la desaceleracióninstantánea“.
De esta forma, si no están atados, saldrán despedidos hacia adelante, golpeándose contra lo que tengan frente a ellos en el habitáculo y hasta podrían ser eyectados del vehículo . Esto último multiplicaría seis veces las chances de morir en el accidente.
Una silla para cada tamaño
En el mercado existen varios modelos de sillas de seguridad, las cuales hay que elegir según el tamaño y contextura física de cada niño.
Por lo tanto, es primordial encontrar el modelo adecuado y colocar al niño correctamente sentado y correctamente sujetado a la silla, con los cinturones de seguridad que incorpora. A su vez, la butaca debe fijarse al auto con el cinturón de seguridad del asiento trasero o con el sistema de anclaje de SRI.
Los modelos disponibles son los siguientes:
– Sillas infantiles Grupo 0 y 0+.Son para bebés de hasta 13 kilos. La colocación de esta sillita será siempre en sentido contrario a la marcha, y en el asiento trasero. El sistema protege al bebé a través de unos arneses dispuestos en la propia silla, que va anclada al vehículo.
– Sillas infantiles del grupo I.Para niños de 9 a 18 kilos. El niño va sujeto a la silla a través de un arnés y ésta al vehículo, permitiendo su colocación en ambos sentidos de la marcha. Es muy importante ajustar la silla a medida que crece el niño, y evitar que los arneses queden flojos, así como la instalación con el cinturón. Este grupo puede adquirirse con anclaje Isofix. En este grupo se recomienda llevar al niño en sentido inverso a la marcha y siempre en el asiento trasero, lo que es obligatorio para la legislación argentina.
– Sillas infantiles del grupo II.Para chicos de 15 a 25 kilos. En esta etapa, los niños deben viajar en sus butacas y los mayorcitos pueden usar el cinturón del auto, pero deben sentarse sobre un elevador o almohadón (booster seat) para que la cinta del cinturón les quede en la cadera y no en la parte alta del abdomen, y la banda superior le pase por la mitad de la clavícula. El elevador con respaldo permite adaptar el recorrido del cinturón de tres puntos a los sistemas de retención, utilizando el cinturón de seguridad del vehículo para sujetar al niño. Con este sistema el niño puede viajar en sentido de la marcha.
– Sillas Infantiles del grupo III. Para niños de 22 a 36 kilos. El asiento elevador pone al niño en posición para que pueda utilizar el cinturón de tres puntos del vehículo con total seguridad. Se coloca en el sentido de la marcha, tanto en plazas traseras como delanteras, esto último a partir de los 12 años según la legislación local. Es recomendado utilizar un elevador con respaldo(grupo II) hasta que el pequeño mida 1,35 metros, si el sistema lo permite.
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