Las petroleras buscan que se les bajen impuestos. Se complica la estrategia oficial de «pisar» los precios
La suba del dólar por encima de los $40 complica cada vez más los planes oficiales de frenar el aumento de los combustibles, mientras que las petroleras analizan pedirle al Gobierno una baja en el impuesto a la transferencia de los combustibles (ITC), y afirman que el precio de la nafta súper debería llegar a los $40 antes de diciembre para lograr ajustarse a la devaluación del peso. Energía intenta convencer a las petroleras que congelen los precios luego de doce aumentos de precios para las naftas y el gasoil que hubo hasta el momento en lo que va de 2018, en un contexto en que el barril de crudo Brent se ubica en torno a los u$s80.
Lo cierto es que de acuerdo a fuentes del sector petrolero, al menos se necesitarían cinco nuevas subas de los combustibles hasta fin de año para actualizar las tarifas de naftas y gasoil, no sólo por la pérdida del valor del peso argentino frente al dólar sino también para trasladar a los surtidores las subas en el impuesto a la transferencia de los combustibles (ITC) y el ajuste en el importe de biocombustibles, sino por el precio del barril de crudo Brent, de referencia local, que ayer cerró con leve baja a 78 dólares.
En el mercado siguen expectantes la cotización del Brent de Londres, después que la la Agencia Internacional de la Energía (AIE) reveló que si no se compensa la caída de la producción de petróleo en Venezuela y las inminentes sanciones de Estados Unidos a las exportaciones de Irán, el precio del crudo podría ir más allá de los 80 dólares el barril.
«La nafta en la Argentina sigue siendo barata» señaló a BAE Negocios un ejecutivo de una de las tres grandes petroleros del país que pidió no ser identificado por lo antipáticas de sus declaraciones en un contexto fuertemente inflacionarios. «El problema es que el país tiene impuestos europeos, pero salarios argentinos» agregó el ejecutivo. La realidad acaso podría darle la razón, ya que la nafta local tiene casi un 50 por ciento de impuestos, mientras que en Europa la carga impositiva es del 60 por ciento. En cambio, en los Estados Unidos la presión impositiva es del 10 por ciento.
Pero lo cierto es que, a pesar de las protestas de las petroleras por los impuestos, la suba del dólar se ha convertido en uno de los problemas centrales para Energía, ya que el combustible en Argentina está por abajo de los 0,90 dólares por litro. De esta manera, y medida en dólares, países como Chile (1,24 dólares por litro), Uruguay (1,70 dólares por litro) o Brasil (1,07 por litro) tienen naftas y gasoil más caros que los argentinos. Y sólo Colombia (0,77 dólares por litro), Ecuador (0,39 por litro) o y Venezuela (0,01 dólar por litro, la nafta más barato del mundo) tiene combustibles más baratos.
Comentarios