Está ubicada en Hoiken 510, y en colaboración con el Comedor de María ubicado en Uani 854, ambos emplazados en el sector de la Margen Sur.
Ambas campañas fueron emprendidas por Carlos Araujo, un hombre que se acercó a los comedores con la propuesta de venta de 500 bonos en cuotas de $200 por 6 meses para aquellos vecinos que se adhieran como socios. El dinero recaudado sería destinado a fondos propios de los comedores.
La propuesta del hombre se basaba en el cobro de la primera cuota como parte de una recaudación propia, en compañía de un grupo 4/5 personas quienes se encargarían de cobrar puerta por puerta. A partir de la segunda cuota los fondos serían destinados a los comedores.
El problema surge a partir de que esta persona no cumplió con su palabra, desapareció sin dejar rastros y continúo cobrando las cuotas. Como consecuencia el Comedor de María decidió suspender la campaña, y el Comedor Virgen del Rosario continuará con la recaudación, pero con una nueva forma de organización.
Viviana quien desempeña su trabajo solidario en el Comedor Virgen del Rosario comentó sobre esta lamentable situación “comenzamos una campaña de socios adherentes, es un bono contribución similar al de bomberos con la diferencia que son 6 cuotas donde el vecino tiene la opción de decir si quiere o no anexarse un bono contribución de $200 mensuales. Se golpea puerta a puerta para contarle al vecino la propuesta donde este dinero va destinado a la institución”.
La iniciativa en un primer momento fue propuesta por Osvaldo Araujo quien se acercó a dialogar con ambas encargadas de los comedores “La tarea de Araujo fue simplemente emprender la campaña solidaria ir hablar con María González (comedor de María) y a su vez en tiempos diferentes, con la hermana María Badini Confalonieri (comedor Virgen del Rosario) para proponerles una ayuda económica para solventar los gastos de los comedores”.
“La primera boleta correspondería a la persona que lo vendió, y la segunda boleta le correspondería al comedor a partir del mes de septiembre; hasta ahora se vendió 400 boletas. Hay mucha gente que ya puso la primera cuota, pero estos señores se quedaron con los troqueles con la información de la gente y les han continuado cobrando, entonces están personas no forman parte del equipo de trabajo y siguen cobrando lo que no es entregado para ningún beneficio”. Manifestó Viviana.
Por su parte sostuvo que Araujo con un grupo de 4 o 5 personas se dirigían a cobrar a los domicilios “Yo hice una denuncia en la Comisaria Tercera y ahora se encuentra en fiscalía. A su vez había entendido que habían emprendido un comedor en Ushuaia”.
Por su parte sostuvo que la campaña continua en el Comedor Virgen del Rosario con el fin de cumplir lo que se pretendía desde un principio “lamentablemente con esta estafa, remontar Virgen del Rosario y restituir la bondad que se había pactado con las personas se está tornando difícil. Nosotros no suspendimos la campaña, nosotros somos un equipo totalmente nuevo, no hay manera de recuperar los bonos porque no sabemos a quién fue vendida”.
Finalmente hizo un pedido a todos aquellos vecinos que se adhirieron a colaborar con esta organización, “Le pedimos a los socios que llamen porque en cada bono está el número, y si tienen dudas si es realmente el cobrador o no tenga la amabilidad de informarnos; los bonos serán firmados por aquellos que pasen a cobrar”.
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