Petroleras quieren reformular pacto con el Gobierno
La posibilidad de que el gobierno le dé un bono a las petroleras YPF, Shell y Axion Energy para compensar las pérdidas por el acuerdo de congelamiento precios por 60 días pactado a principios de mayo con el ministro de Energía, Juan José Aranguren, complica el sostenimiento del arreglo. A pesar que el estado reconoce que le adeuda a las petroleras una suba del 12% en los surtidores por la suba del barril de crudo- el brent cerró por arriba de los u$s79 el barril- y la devaluación del peso, en el mercado creen que la suba del valor de la nafta y el gasoil debería actualizarse en un 25% para volver a los niveles anteriores a la crisis.
Lo cierto es que en el mercado creen que actualizar el precio el litro de combustible a costar cerca de $40 es impracticable, pero advierten que tampoco es sustentable que se compense a las petroleras como lo hizo en marzo el gobierno, cuando decidió pagarles en cuotas a partir de enero del 2019 los 1.500 millones de dólares por los subsidios retrasados del «Plan Gas», lanzado durante el gobierno kirchnerista en 2013 y que subvencionaba con un precio mínimo de 7,5 dólares por millón de BTU.
Pero el temor de las empresas sigue siendo la forma de cancelación de la deuda, ya que el modelo que podría seguir el gobierno no es el de pagar por las obligaciones incumplidas en todo 2017 en 30 cuotas por un total u$s 1.583 millones y sin ninguna tasas de interés -como se hizo en marzo-, sino retrotraerse al modelo de 2016, cuando el estado le devolvió a las empresas u$s1.100 millones en bonos con una tasa de interés anual del 8 por ciento para compensarlos por los subsidios impagos del 2015. Por caso, la estatal YPF, la petrolera más grande del país, recibió en ese momento más de u$s780 millones de dólares en bonos.
En este contexto, el «Acuerdo de estabilidad de precios con cuenta compensatoria» que Energía pactó con YPF, Shell y Axion Energy, las tres principales empresas refinadoras del país, empieza a hacerse cada vez más difícil de aceptar por las compañías. De acuerdo a lo publicado ayer por el sitio EconoJournal.com, que accedió en exclusiva a la fórmula polinómica que se utilizará para compensar a las petroleras firmadas durante el segundo semestre, el estado adeuda a las petroleras un aumento del 12% en los surtidores por el alza del precio internacional del petróleo y del tipo de cambio del mes de abril.
Surtidores calientes
Mayo no fue un mes tranquilo en los surtidores: el barril del petróleo Brent de Londres escaló a su nivel más alto desde 2014 y la devaluación del peso frente al dólar fue cercana al 17% durante el mes. En este escenario, el acuerdo firmado en marzo con las refinerías y petroleras parece haber quedado como una meta difícil de cumplir. Y aunque como señala el sitio EconoJournal.com el arreglo entre estado y petroleras prevé que «las acreencias en favor de las petroleras no logran ser compensados antes del 31 de diciembre de este año, la cartera que dirige Aranguren se compromete a subsanar esa situación mediante un mecanismo económico que se implementará antes del 31 de marzo de 2019», dada las negociaciones recientes con el FMI de la Argentina y las opiniones contrarias del Fondo a entregar subsidios a empresas energéticas, muchos analistas del mercado afirman que la solución de un bono y un acuerdo de cuotas sea la que se imponga en la realidad de ajuste que vive el estado nacional por estos días.
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